Blog donde recopilo lo (subjetivamente) mejor de fragmentos, artículos y reflexiones de textos místicos, religiosos, espirituales o filosóficos que me voy encontrando por mis peripecias literarias.

'Morir para ser Yo', Anita Moorjani

 


“Mientras contemplaba ese gran tapiz que era la acumulación de toda mi vida hasta ese punto, fui capaz de identificar con toda exactitud cómo es que había llegado hasta el extremo en el que me hallaba hoy”


“Intentar ser algo o alguien diferente no me llevaría a ser mejor, ¡sino sólo a privarme de mi verdadero ser! Impediría así que otros experimentaran quién soy verdaderamente, a la vez que me impediría a mí interactuar auténticamente con ellos. Además, al no ser auténtica estaría privando al universo de la persona que he venido aquí a ser y de lo que he venido aquí a expresar.”



“Me inundó una sensación de victoria. Había superado tan absolutamente el miedo a todo —desde el miedo a morirme de cáncer hasta el terror a la quimioterapia— que lo que estaba pasando servía para demostrarme que era el miedo lo que me había estado destruyendo.”


“Me di cuenta de que mi conexión había empezado a aflojarse y de que no había estado dejando que mi verdadero yo fluyera. Una vez más, había estado escondiendo mi ser real, debido al miedo y a la inquietud.”


“Como ya he dicho, la pregunta que me hace la gente con más frecuencia es por qué creo que enfermé de cáncer. Puedo resumir la respuesta en una sola palabra: miedo.”



“Mientras estaba en el otro mundo en ese estado de claridad, instintivamente comprendí que me estaba muriendo por culpa de todos mis miedos. No había estado expresando mi verdadero ser porque mis preocupaciones me lo impedían. Comprendí que el cáncer no era un castigo ni nada parecido. Era solamente mi propia energía manifestándose en forma de cáncer, debido a que mis miedos no me permitían expresarme como la fuerza llena de magnificencia que era mi verdadero ser. En ese estado de expansión, me di cuenta de lo mal que me había tratado a mí misma y cuánto me había juzgado a lo largo de mi vida. La enfermedad no era un castigo. Por fin entendí que era a mí a quien yo no había perdonado, no a los demás. No tenía nada que ver con ninguna otra persona. Me vi como una preciosa hija del universo. Sólo con existir ya me merecía el amor incondicional.”


“No recuerdo haber sido jamás alentada a quererme. Nunca. De hecho, ni siquiera se me habría pasado por la cabeza hacer algo así, porque si lo haces parece que estás siendo egoísta. Sin embargo, mi ECM me permitió descubrir que ésa era la clave de mi curación.”


“Cuando somos conscientes de nuestra propia magnificencia, dejamos de sentir la necesidad de controlar a los demás, a la vez que no permitimos tampoco que nos controle nadie.”


“Al principio puede ser complicado y prestarse a engaño distinguir si lo que nos mueve es la mente o nuestra verdadera identidad. La diferencia es que la mente tiene relación con el hacer, mientras que el alma tiene que ver más bien con el ser.”


“El proceso de permitir se logra primero confiando y después siendo siempre auténtico conmigo mismo y fiel a quien soy realmente. De esta forma, sólo atraeré lo que es de verdad mío y lo que con certeza me pertenece, y todo sucederá al ritmo con el que me siento confortable. Puedo seguir centrándome en lo que me preocupa o en lo que creo que necesito o que me falta, pero entonces mi vida no avanzará hacia lo que me gustaría experimentar. Se quedará tal como está ahora, porque estoy prestando atención a mis miedos y a lo que me molesta o me deja insatisfecha e incompleta, en vez de permitir que se expanda mi conciencia mediante la confianza y la aceptación de nuevas experiencias. “


“La necesidad de perdonar nace cuando juzgamos las cosas como buenas o malas; pero si no hay juicios, no hay nada que tengamos que perdonar.”


“El egoísmo proviene de amarse muy poco a uno mismo, no de quererse demasiado; somos egoístas porque tratamos así de compensar nuestra carencia. No existe eso de quererse demasiado, igual que tampoco existe eso de tener demasiado afecto genuino por los demás. Nuestro mundo sufre debido a que hay mucha carencia de amor por uno mismo, y demasiados juicios, demasiadas críticas, demasiadas inseguridades, miedos y desconfianzas. Si todos nos quisiéramos más, desaparecerían la mayoría de estas dolencias.”

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